Vega ha iniciado recientemente su nueva gira en acústico con 8 fechas con las que recorrerá nuevas ciudades de toda la geografía española. Con esta nueva gira, Vega, quiere acercar a su público las canciones que la han convertido en una de las artistas más valoradas a nivel nacional gracias a 20 años de carrera.
Hemos querido saber más sobre esta gira y hemos tenido esta gran charla con ella.
Indie Cool: Este año ha sido muy intenso a todos los niveles, ¿Cuándo vas a coger vacaciones?
Vega: (se ríe) Llevo sin tener unas vacaciones desde el 2011 y desde que monté la Madriguera no he vuelto a tener. Siempre viajo a los sitios por mi trabajo y me siento muy afortunada por poder viajar y conocer otros sitios, pero en el fondo sigo trabajando, así que no es un viaje de desconexión.
I: Sí, porque la gente se piensa que viajar cuando trabajas está guay, pero en realidad no es lo mismo.
V: No tiene nada que ver, exactamente nada, pero bueno, está bien, tampoco me puedo quejar, por otro lado, me siento muy afortunada de trabajar y de vivir de lo que me gusta, aunque haya muchas cosas por el medio que no me gustan dentro de la industria en la que me muevo, pero es verdad que me siento muy afortunada por poder tener mi propio sello y poder hacer lo que quiero sin tener que atener ni a demandas ni a mercados ni a nada, voy un poco libre, con lo bueno y con lo malo.
I: Sí, eso tiene muchas ventajas, imagino que inconvenientes, no sé si el circuito musical te cierra un poco las puertas cuando tienes tu propio sello y no dependes de otros.
V: Esto es como todo. Te voy a poner un símil, tú quieres una tarta y al principio no te ayudan, no te van a dar esa tarta dentro de lo que es la infraestructura como una multinacional, nadie va a fabricar una tarta para ti. Decides montarla tú sola con todos los costes y el desgaste que tiene hacerte tu tarta, de tu configuración de vida y de profesión. Luego que pasa, que cuando tu construyes sobre esa tarta y obviamente los recursos, la inversión y todo es tu tarta, de esa tarta no come nadie más, así que obviamente cierra muchas puertas.
V: Pero si la tarta estuviera mala no hay problema, pero como la tarta está buena se mosquean un poco, porque una tarta mala se deja en el plato y no pasa nada. Después de veinte años de carrera y diez sobreviviendo, muy a pesar de muchas cosas, bueno a veces no gusta mucho, pero yo quiero seguir, soy bastante guerrillera, hay días que me agoto y digo ¡a la mierda!, con perdón, pero ya está, luego normalmente suelo levantar cabeza y querer luchar las cosas.
I: en esos momentos de frustración, cuando te dan ganas de mandar todo a la mierda, ¿te alejas de los móviles, de las redes sociales, o de whatsapp?
V: Bueno el whatsapp para mí por desgracia es imposible, porque la Madriguera no deja de ser como un sello familiar, trabajo con mis hermanas, y luego como madre y como oficio, muchas veces tengo que viajar, estar fuera, el sentimiento de culpa, tengo una hija pequeña, el colegio, el chat de padres y ese tipo de cosas, es algo de lo que no me puedo librar ningún día, pero las redes sin embargo sí, de hecho en mis redes soy muy comedida, aparte de ser bastante aséptica en el sentido de que cuando tengo algo que contar lo cuento a nivel profesional, cuando quiero contar algo personal, para hacer una reflexión sobre cosas que acontecen a todos a nivel social y a nivel personal y luego muchas veces son para hacer eco de cosas a nivel social y de asociaciones con las que colaboro, bueno ya que he podido conseguir al hacer este trabajo tener un público que por suerte no solamente de foto, sino que lee, pues poder contarle las cosas que me mueven y me preocupan, pero más allá de eso no soy muy esclava de las redes, las dejé hace mucho tiempo, me di cuenta que en el manejo de ellas sí, pero mentalmente no soy de la generación punto cero.
I: ¿De qué generación eres tú? ¿eres millennial?
V: ¿Yo? no, no lo soy, y aparte reconozco que sería absurdo pretender ser millennial con 43 años y las vivencias que yo tengo. Tengo 43 años, pero tengo que reconocer que ya era viejuna con 18 años, no me gustaba salir por las noches, prefería escribir, ver pelis.
I: ¿ Y sigues siendo viejoven?
V: Dentro de la industria musical digo muchas veces ‘esto me pilla mayor’, tengo mucha capacidad para entender cómo se mueven generaciones más jóvenes, otra cosa es que yo tome la decisión de impostar algo que no soy para poder adaptarme a unos mercados y unas tendencias.
I: Leí una entrevista tuya que quizás añores una juventud de la que tú misma te privaste.
V: Sí, a veces pienso que por la vida que tuve, viví un tipo de adolescencia con muchas cargas desde muy pequeñita. A veces pienso que me hubiera gustado ser más inconsciente en algunos momentos y vivir la vida padre con 23. Pero bueno también he tenido muchas cosas positivas por las decisiones que he tomado. Creo que estoy esperando en parte un momento de calma para poder dedicarme a hacer mis locuras.
I: ¿A qué te refieres exactamente con asentar tu carrera?
V: Yo creo que he tenido mis fases, mi primera fase de pasar de multinacionales a tener mi propio sello, no es fácil y sobre todo prolongarlo en el tiempo, y también esto significa que hay un público fiel y sólido. Cuando digo asentar, me refiero a preguntarme qué es lo próximo que quiero hacer, pero desde la calma. Voy trabajando contra corriente a una industria que lo que demanda es sacar contenido constantemente sin que deban tener calidad, y yo voy con cosas muy sólidas y trabajándolas a largo plazo. Al tener un sello único todos los elementos son premium y siguen mis valores y eso siempre eleva el coste.
I: ¿Y en tu sello solo está tu proyecto?
V: Sí, artísticamente sí. Lo que pasa que la madriguera abre las puertas a otras inquietudes, como el proyecto de cine donde actuaba un productor. Me encantaría que la madriguera se convirtiera en una fundación para la música cuando yo me retire.
I: Si tuvieses que fichar a una banda joven o a un solista ¿a quién ficharías?
V: Por ejemplo, a Andrea Santiago, una chica que me mandó una cover por Instagram, la invité a abrir el concierto en Barcelona, la animé a hacer un disco y a hacer uno juntas. Me parece una artista con mucha personalidad, con muy buena intención y al final consiguió sacar su disco independiente.
I: ¿Qué le dirías a un grupo nuevo que intente sacar un disco en solitario con un sello independiente o que se acoja a las manos de un sello discográfico potente?
V: La decisión la deberían tomar ellos con conocimiento total de lo que es una cosa u otra. Yo animar a la gente a hacer proyectos independientes porque yo el mío lo monté así creo que sería un poco superfluo porque yo lo monté con una base de público consolidada. Con una banda que empieza de cero y trabaja con una multinacional va a tener que aguantar muchas cosas que no le van a gustar, pero es verdad que tienen una gran capacidad dentro del mercado, que de forma independiente es mucho más difícil. Las bandas emergentes y solistas y sobre todos si son chicas, especialmente en géneros como el Indie, es complicado.
Con respecto a los festivales, hay festivales que quieren tener repercusión local, y a mí a veces me llaman para arropar a otros artistas, y yo voy feliz porque me mueven esas cosas, pero hay otros que te malpagan y que solo quieren poner tu nombre para cumplir el cupo de artistas mujeres, y eso no cumple con mis principios.
I: Yo creo que lo mejor que nos podría pasar es que en España se terminase un poco esta fama de los festivales, porque además hay tantos, que al final, las salas quedan en segundo plano.
V: Sí, están mandando un mensaje erróneo al público de que el festival es fiesta, y se cargan las salas. Pero esto no es nuevo, porque en su momento pasó con las radios, y después llegó Spotify y reventó todo el tema de las radios, porque las radios se comportaban antes como ahora los festivales, eran un escaparate, y ahora Spotify se ha convertido en el escaparate, y ahora es igual de complicado entrar en Spotify y este condiciona quién va y quién no va a un festival por el número de oyentes.
I: Vamos a hablar de tu nueva gira, Vertebrada, que es en formato acústico y me parece muy innovadora ya que dejas elegir a tu público qué canciones quieren escuchar, ¿cómo funciona eso?
V: Yo notaba en los conciertos que el público fiel que me ha ayudado a construir mi carrera, gritaban ‘cántame esta’, así que le quería dar la oportunidad al público de que me dijeran qué querían escuchar, pero quería que la gente que fuese a ir al concierto fueran los que eligieran las canciones, eso implica que en cada ciudad puede variar el repertorio, entonces se me ocurrió una forma intermedia de poder elaborar un repertorio conjuntamente con el público, les he dado a elegir dentro de las 113 canciones tienen hasta una semana antes del concierto, con su reenvío de entradas pueden enviar sus cinco canciones preferidas. Yo traslado a una aplicación esas canciones y eso resulta en las canciones que tienen más votos están seguro y luego de las que tienen igualdad de votos ya decido yo cuáles van a formar parte del repertorio. Me he encontrado que los gustos varían por zona, dependiendo de la ciudad. Es un reto, es la forma de darle la oportunidad de formar parte al público y es muy gratificante ver a la gente satisfecha y saber que van a volver porque se sienten tenidos en cuenta.
I: ¿Ninguno de los fans te ha pedido una canción en plan troleo?
V: No, pero sí me ha pasado que me han pedido versiones de otros grupos, pero claro sería aumentar muchísimo el número de canciones, por lo que tienen acotado que deben elegir entre las canciones que he publicado yo bajo mi nombre.
I: ¿Qué tal se llevan Vega y Mercedes?
V: Ahora de puta madre, pero he tardado un montón, porque Mercedes se sentía bastante fustigada con las exigencias que me ponía yo como artista, que no me hacían feliz. Por primera vez hay una reconciliación, porque ambas están en el mismo barco queriendo lo mismo. Vega artísticamente responde a lo que yo quiero hacer como persona, porque me di cuenta de que no soy feliz haciendo las cosas que no quiero hacer.
I: En otra entrevista leí que, a pesar de tu carrera sólida, sigues teniendo vértigo crónico, que aún tienes miedo a veces a defraudar, ¿tu crees que ese miedo te ayuda a tener los pies en el suelo o quizás te delimita?
V: Creo que me ayuda a tener los pies en el suelo. Pero sí, también muchas veces una cortapisa para llegar a más. Pero es verdad que para algunas cosas tengo una actitud muy conservadora, por ejemplo, si pongo últimas entradas es porque quedan cinco, y hay gente que pone últimas entradas y quedan 100. Yo es que creo que las medias verdades no llevan a ningún lado.
I: Quizás a veces parece que los falsos sold outs y las falsas ultimas entradas hacen parecer que unos grupos o artistas venden más que otros que están siendo más honestos.
V: Bueno, los promotores sí son conscientes de esto, y saben cuando un artista vende o no vende. Hay que demostrar solvencia en todos sitios, por lo que yo duermo muy tranquila siempre.
I: Las cifras de Spotify son muy engañosas, creo que las generaciones de la actualidad escuchan más singles, entonces no apoyan tanto al artista y no sé si comprarían entradas para ir a verlo.
V: No lo sé, creo que hemos pasado a hacer listas y poner música de fondo, entonces saber cuál de ellos tiene luego el peso suficiente como para vender entradas es complicado. A mí me mandan mensajes de hacer anuncios para conseguir más seguidores en Instagram, pero a mí esas cosas no me interesan, son solo por tener más números, ni siquiera van a ser personas a las que les interese mi música, en estas cosas es cuando digo que ya estoy mayor para esto. No quiero entrar en ese mundo de las apariencias, porque de esa forma me permite llevar mi carrera de una forma más real y ponerme metas y proyectos que sean realmente factibles y solventes. Y para gente joven muchas veces es muy dañino, porque les puede generar mucha frustración.
I: Muchas gracias por tu tiempo.
