Cuando Ander Cabello y Gabriel de la Rosa se conocieron en un local de ensayo en el pueblo de Abadiño y comenzaron a componer canciones y colgarlas en Internet por puro hobby, poco imaginaban lo que el futuro les deparaba. Trece veranos después, Shinova ya lleva seis álbumes a sus espaldas y la banda vasca se ha consolidado en la escena del indie rock estatal.
Para Shinova cada álbum es una fotografía, una imagen que refleja sus sensaciones a la hora de componerlos. Y se puede deducir a través de su último trabajo, La buena suerte, que la formación vizcaína vive un momento dulce. A pesar del contexto del nacimiento del proyecto, cada canción destila optimismo, liberación y una gran sensación de épica. Casi se siente como estar en el borde de un acantilado y otear el horizonte.
En la canción Ídolos, la banda reza para que «los mejores momentos sean los que están por llegar«. Quién sabe si por obra del destino o del azar, pero parece que sus oraciones han sido escuchadas.
Shinova actuará en el Cruïlla Tardor y no te lo puedes perder! Será en la Sala Wolf el próximo 12 de noviembre.
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