El pasado 7 de marzo, con todas las entradas vendidas, llegó la techno-rumba al WiZink Center de la mano de María Ángeles y Dioni. Un estilo que llevamos viviendo desde hace 25 años +1, nombre de su gira, gracias a Camela, y que nos presentan a través de su disco Rebobinando. Alaska, Taburete, David Bisbal, Juan Magán, Demarco, Javiera Mena, Medina Azahara, Carlos Baute, Antonio Carmona, Rubén Martín, Pitingo y María Toledo han colaborado en esta recopilación de sus mejores éxitos.
Habrá muchos seguidores de este icono musical de nuestro país al igual que otros tantos detractores, pero nos parezca bien o mal, lo recordemos con cariño o con cierto desapego, es indudable no reconocer sus canciones de cuando nuestros padres nos llevaban a los coches de choque de la feria.
Os preguntaréis que por qué hablamos de Camela si somos una página indie. No lo hay más indie que Camela, no sin pensar antes en ellos. Podemos hacer un repaso a algunos puntos que selecciona la web de Más de Cultura, que muchos de vosotros habréis percibido si coincidís con la afirmación de que “Camela es indie”.
- Fue Dioni quién en mitad del concierto nos contó cómo habían logrado darse a conocer a través de la venta de sus casetes en las gasolineras, un millón de ellos con su álbum “Lágrimas de amor”. Ninguna emisora apostó por ellos ni lo hace a excepción de Rediolé y, aun así, ahí están al pie del cañón.
- El calor de mi cuerpo tiene un videoclip de lo más moderno y cuyo espacio podría ser ocupado por cualquier otro grupo al que se le atribuye la denominación de independiente.
https://www.youtube.com/watch?v=z9cOlv3E8bY
- Te prometo el universo, tiene un videoclip de lo más actual, ya que el panorama musical está repleto de astros, astronautas… pero es que Camela lo utilizó hace ya cuatro años, mucho antes de algunos nombres de grupos, festivales y estéticas elegidas que podemos ver hoy en día.
https://www.youtube.com/watch?v=S_mvO6UcZ0k
- Seguramente que al escuchar Kitt y los coches del pasado de Ladilla Rusa te recuerda a algo y aún no sabes a qué, ¿y si piensas en el rollo electrónico de Camela? Tampoco iríamos desencaminados si nos paramos a pensar en los estilos de ropa.
- El Sonorama, el festival de la música alternativa por excelencia de nuestro territorio, contó con ellos en su cartel del año 2017, ¿aún sigues diciendo que Camela no es indie?
Era necesario hacer unas cuantas aclaraciones antes de hablar del concierto en sí, lo primero de todo, hay que decir que Camela no se puede explicar con palabras, Camela es para vivirlo, para sentirlo. El grupo madrileño y su público son espectáculo y la pasada noche del sábado volvieron a dar una lección de lo que es la gente que se lo curra desde abajo con piedras en el camino, pero demostrando que, si se quiere, todo se puede lograr con esfuerzo propio.
Foto: @nabscab
En cuanto a su público, no necesita un público glamuroso que vaya con la corriente de los tiempos, su público es fiel a su filosofía desde sus principios, y eso se nota. Aunque también hay que destacar que también asistieron abuelos y niños, polos opuestos, pero que, si analizamos la letra de sus canciones, nos damos cuenta de que pueden aplicarse a cualquier rango de edad, o al menos ser escuchadas. El amor y el desamor como temas estrella nunca pasarán de moda, o eso esperamos, hoy que las canciones hablan de sexo y sentimientos pasajeros, el uso de las personas como si de cosas se trataran, el remplazamiento inmediato como con los cromos en un patio, de los de antes, son temas que no están o no deberían estar en muchas ocasiones, al alcance de todos.
Nosotros nos dejamos llevar, lo vivimos a tope, la magia de Camela junto con sus sorpresas (El Arrebato, Demarco, Taburete y Rubén Martín) te envolvía en un clima de desconexión, de ¡wow! ¡vaya conciertazo!
Yo, fiel seguidora por culpa de mi hermana, ¿qué voy a decir? Pues que ¡viva Camela!
